JONATHAN SALIÓ DE PALACIO MUNICIPAL LA ULTIMA VEZ QUE FUE VISTO
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Playas de Rosarito.- Jonathan Domínguez fue visto por última vez aquel 7 de enero del 2022 cuando salió de la Casa Municipal abordó su auto para luego percatarse de que le habían ponchado una llanta.
Así lo cuenta con la voz entrecortada su madre Cruz Domínguez Figueroa, quien ha pasado de todo, incluidas amenazas, la doble criminalización de su caso, los comentarios hirientes de funcionarios y de agentes de la Fiscalía General del Estado.
Los mismos agentes quienes apenas hace unos días le dan razón de la trayectoria del teléfono celular de su hijo. Un caso cuya investigación sigue en su etapa incipiente a tres años de ocurrido.
Jonathan Norberto Domínguez era un abogado recién egresado de la universidad, se desempeñaba como notificador de la Sindicatura a cargo del transportista Jaime Ibarra Acedo.
De manera inexplicable al joven de 26 años le fueron encomendando hacer mandados fuera de su horario de trabajo, incluso favores a policías como aquel de ir a traer un auto «Racer» desde Mexicali, o portar un arma de fuego por su propia seguridad, cosas que le incomodaban y preocupaban, comenta su madre.
Presentes tiene las frías e insensibles palabras de la entonces alcaldesa de Rosarito Araceli Brown Figueredo, en un periodo en el que hoy se puede asegurar que el número de desaparecidos en Rosarito aumentó considerablemente.
«Yo qué voy a hacer por tu hijo?, él se fue por su propia voluntad», recuerda le dijo Araceli Browncuando la encaró para pedirle que le ayudara a encontrar a su muchacho. Fue la última vez que habló con la hoy diputada federal.
«Todos los políticos son unos mentirosos profesionales, sólo ven por sus intereses», expresa con amargura la madre buscadora.
No olvida cuando un oficial le dijo cruelmente, “no pierdas el tiempo a tu hijo ya se lo comieron los tiburones”.
Cruz Domínguez hoy pertenece al Colectivo «Enlace y Restauración» y dedica su tiempo en buscar a su hijo por cada rincón posible.
Nada borra el dolor y la frustración cuando confirmó que los mismos policías investigadores borraron la escena del lugar en la llantera de donde se llevaron con lujo de violencia a su vástago desde donde le llamó para decirle que no se preocupara que ya iba en camino a casa y que sólo pasaría por unas palomitas de maíz al cine para llevárselas. Pero nunca llegó.
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